Documento de investigación sobre la inteligencia emocional de los estudiantes

Dado que los profesores tienen la posibilidad de estructurar las mentes de las generaciones venideras, la asociación expresiva entre el profesor y el alumno se ha convertido en algo esencial, ya que continúa para siempre. Sin embargo, un profesor tiene algunas limitaciones para comunicarse con los alumnos a nivel emocional. Es responsabilidad de los profesores formar a los alumnos del mañana con una actitud positiva y constructiva hacia la vida.

En palabras llanas y sencillas, la IE o inteligencia emocional es la aptitud para comprender tus emociones individuales, para entender lo que te dicen los demás y las personas que te rodean. La concepción más convincente de la IE es que, como profesor, debes poseer una autoconciencia que te facilite identificar los sentimientos gestionando tus emociones. La IE ayuda a desarrollar su rendimiento profesional. La inteligencia emocional también ayuda a cultivar una conexión más sana, a alcanzar un mayor éxito en el trabajo y a llevar una vida gratificante. El término “inteligencia emocional” se popularizó a mediados de los años 90 con el libro del famoso periodista Daniel Goleman, “Inteligencia emocional: Por qué puede importar más que el coeficiente intelectual”.

Importancia de la inteligencia emocional en la vida cotidiana

Los individuos emocionalmente inteligentes destacan. Su capacidad para empatizar, perseverar, controlar los impulsos, comunicarse con claridad, tomar decisiones meditadas, resolver problemas y trabajar con los demás les hace ganar amigos y éxito. Suelen llevar una vida más feliz, con relaciones más satisfactorias. En el trabajo, son más productivos y estimulan la productividad de los demás. En la escuela, obtienen mejores resultados en los exámenes estandarizados y contribuyen a crear una atmósfera segura y cómoda en el aula que facilita el aprendizaje.

El psicólogo y escritor Daniel Goleman popularizó el término “inteligencia emocional” en su libro homónimo, un éxito de ventas de 1995. Lo que es la inteligencia emocional, dice Goleman, “es la capacidad de reconocer nuestros propios sentimientos y los de los demás, de motivarnos y de gestionar bien las emociones en nosotros mismos y en nuestras relaciones”. O, como dice Maurice Elias, profesor de psicología de la Universidad de Rutgers, “es el conjunto de habilidades que nos ayudan a llevarnos bien en la vida con otras personas en todo tipo de situaciones vitales”. Lo llama la “pieza que falta” en la educación estadounidense.

Ensayo sobre la importancia de la inteligencia emocional

Puede que conozcas el coeficiente intelectual de un alumno, pero ¿qué pasa con su cociente de inteligencia emocional? La inteligencia emocional es diferente de la capacidad cognitiva, pero puede ser igual de importante[13]. Si puedes enseñar a tus alumnos a reconocer y regular sus emociones, estarán mejor preparados para concentrarse y alcanzar su potencial tanto dentro como fuera del aula.

Sigue leyendo para saber más sobre la inteligencia emocional y cómo puede aumentar las capacidades académicas y socio-emocionales de tus alumnos. A continuación, descubra algunas estrategias y actividades que puede utilizar para mejorar la inteligencia emocional de sus alumnos.

En primer lugar, una breve definición de la inteligencia emocional: es la capacidad de tener conciencia de los sentimientos y gestionarlos. Además, la inteligencia emocional implica el uso de las emociones para planificar y alcanzar los objetivos[5] Al igual que el coeficiente intelectual, el cociente de inteligencia emocional de cada persona puede variar de bajo a alto y no está necesariamente relacionado con las capacidades cognitivas.

Importancia de la inteligencia emocional en la educación pdf

Todas las mañanas, la Sra. Mitchell piensa en cómo sus sentimientos afectarán a su labor docente. Si se siente frustrada o abrumada cuando llega a la escuela, respira hondo y elabora un plan para gestionar sus emociones, de modo que pueda comprometerse plenamente con sus alumnos y profesores. Saluda a los niños y a las familias cuando entran por la puerta y les pregunta cómo se sienten. A lo largo del día, los niños utilizan un medidor de estado de ánimo para reconocer sus sentimientos. La Sra. Mitchell también utiliza el medidor de estado de ánimo para hablar con los niños sobre sus propios sentimientos, sobre cómo se sienten los personajes de los libros, sobre qué ha provocado sus sentimientos y sobre cómo cambian las emociones de los personajes a lo largo de una historia. De muchas maneras diferentes, la Sra. Mitchell modela la inteligencia emocional y apoya su desarrollo en sus alumnos.

La inteligencia emocional es un conjunto de habilidades relacionadas con el control de las emociones propias y ajenas, y la capacidad de utilizar las emociones para guiar el pensamiento y las acciones (Salovey y Mayer, 1990). Las emociones influyen en nuestra atención, memoria y aprendizaje, en nuestra capacidad para establecer relaciones con los demás y en nuestra salud física y mental (Salovey y Mayer, 1990). El desarrollo de la inteligencia emocional nos permite gestionar las emociones con eficacia y evitar que nos descarrile, por ejemplo, un arrebato de ira.