Biografía de frida kahlo para niños

Nacida de padre alemán y madre mestiza, Kahlo pasó la mayor parte de su infancia y su vida adulta en La Casa Azul, su casa familiar en Coyoacán, que ahora es accesible al público como Museo Frida Kahlo. Aunque quedó discapacitada por la poliomielitis cuando era niña, Kahlo era una estudiante prometedora que se dirigía a la facultad de medicina hasta que sufrió un accidente de autobús a los 18 años, que le causó dolores y problemas médicos de por vida. Durante su recuperación, retomó su interés infantil por el arte con la idea de convertirse en artista.

El interés de Kahlo por la política y el arte la llevó a afiliarse al Partido Comunista Mexicano en 1927,[1] a través del cual conoció al también artista mexicano Diego Rivera. La pareja se casó en 1929,[1][5] y pasaron juntos los últimos años de la década de 1920 y los primeros de la de 1930 viajando por México y Estados Unidos. Durante este tiempo, desarrolló su estilo artístico, inspirándose principalmente en la cultura popular mexicana, y pintó sobre todo pequeños autorretratos que mezclaban elementos de las creencias precolombinas y católicas. Sus cuadros despertaron el interés del artista surrealista André Breton, que organizó la primera exposición individual de Kahlo en la Galería Julien Levy de Nueva York en 1938; la exposición fue un éxito, y le siguió otra en París en 1939. Aunque la exposición francesa tuvo menos éxito, el Louvre compró un cuadro de Kahlo, El marco, convirtiéndola en la primera artista mexicana que figuraba en su colección[1] A lo largo de la década de 1940, Kahlo participó en exposiciones en México y Estados Unidos y trabajó como profesora de arte. Dio clases en la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado (“La Esmeralda”) y fue miembro fundador del Seminario de Cultura Mexicana. La salud de Kahlo, siempre frágil, empezó a decaer en esa misma década. Su primera exposición individual en México tuvo lugar en 1953, poco antes de su muerte en 1954, a la edad de 47 años.

Frida kahlo: la artista que pinta…

Con delgados pinceles de marta, Frida Kahlo plasmó minuciosamente su atrevida uniceja y su bigote en docenas de autorretratos. Esta misma Frida también se afeitó tres años de su edad, afirmando que fue 1910 el año en que nació en Coyoacán, México, en lugar de 1907.

¿Vanidad? No. Frida, que siempre fue su modelo favorito, no trataba de conservar la belleza juvenil, sino de identificarse con México, su amada patria. El “año de nacimiento adquirido” de Frida coincide con el estallido de la Revolución Mexicana (1910) y el derrocamiento del presidente Porfirio Díaz.

Si su flagrante mentira parece chocante e incongruente -incluso perturbadora, frente a su habitual franqueza-, reflexione por un momento sobre las imágenes yuxtapuestas que caracterizan sus cuadros. Frida nunca permitió que los hechos aparentes -su propio certificado de nacimiento, por ejemplo- se interpusieran en el camino de una verdad superior; la verdad, en este caso, es que ella y el México moderno estaban inextricablemente unidos en la revolución y el renacimiento.

La comprensión de Frida Kahlo, tanto de la persona como de las pinturas, requiere dejar de lado los pensamientos convencionales, y las fechas, según el caso. Al mismo tiempo, paradójicamente, requiere el contexto de la historia. Ella fue una artista revolucionaria nacida en medio del caos político de su país; nacida en el año de su propio renacimiento sangriento, más o menos un par de años. Esa imagen, según la artista, es más veraz que los propios hechos. Sería una argucia no estar de acuerdo.

Dónde murió frida kahlo

“He hecho bien mis cuadros… y tienen un mensaje de dolor, pero creo que interesarán a algunas personas. No son revolucionarios, ¿por qué sigo creyendo que son combativos?” 3 de 11

“Realmente no sé si mis cuadros son surrealistas o no, pero sí sé que son la expresión más honesta de mí mismo, sin tener en cuenta las opiniones y prejuicios de los demás”. 5 de 11

“No hay nada más precioso que la risa y el desprecio. La fuerza está en reírse y dejarse llevar. En ser cruel y superficial. La tragedia es la característica más ridícula del “Hombre”, sin embargo, estoy seguro de que los animales, aunque “sufren”, no desfilan su pena en “teatros” abiertos o “cerrados”.” 6 de 11

“Mi cabeza está llena de arañas microscópicas, y de innumerables bichos diminutos… No puedo enderezar nada dentro de la gran realidad sin pasar directamente a un curso de colisión; o tengo que colgar mi ropa del aire, o tengo que acercar peligrosa y fatalmente las cosas distantes. Ya lo solucionarás con tu regla y tu brújula”. 7 de 11

Frida kahlo: 1907-1954 – dolor y…

Lo que se dice por ahí es que hay momentos en la vida que son difíciles para todos, pero que son necesarios para crecer y mejorar como personas. Son momentos que, por ser difíciles, tienen mucho que mostrar y enseñar y a la larga la gente agradece haberlos vivido. Érase una vez, en una ciudad de México llamada Coyoacán, una niña a la que sus padres llamaron Magdalena Carmen Frida Kahlo Calderón. “Los pies, para qué los necesito si tengo alas para volar”, decía Kahlo. Es una de sus famosas frases escritas un año antes de su muerte (1954). Significa que aunque una persona a veces no tenga lo básico para lograr sus objetivos, siempre tendrá un inmenso potencial dentro de ella para explotar. La vida de Frida Kahlo estuvo marcada por muchas enfermedades y tragedias, pero esos acontecimientos no le impidieron convertirse en una gran pintora. Ella fue un ejemplo vivo de cómo algunas circunstancias difíciles cambian la vida de cualquier persona y la convierten en alguien mejor.

A los dieciocho años le ocurrió una de sus desgracias. Tuvo un accidente; el autobús en el que iba de la escuela chocó con un tranvía. Murieron varias personas y ella sufrió graves daños: un pasamanos de hierro le atravesó la pelvis fracturándole el hueso. También se fracturó varias costillas, las piernas y la clavícula. Muchos, incluidos los médicos, pensaron que no sobreviviría. Pero se demostró que estaba equivocada después de sobrevivir a varias cirugías. Mientras se recuperaba en el hospital es cuando descubre su amor por la pintura y aprende a pintar estudiando el Renacimiento italiano. Comenzó a pintar retratos de familiares y bodegones desde su cama. Por lo tanto, un accidente mortal hizo que Frida Kahlo se convirtiera en la gran artista que fue.