El jardín de las delicias” de…

Las obras del pintor holandés Hieronymus Bosch son conocidas por su fantástica imaginería y sus delicados detalles. Pero ninguna es tan conocida ni tan ambiciosa como su Jardín de las Delicias, una obra tan cargada de simbolismo que sigue despertando la curiosidad más de 500 años después de ser pintada.

El Bosco se atrevió a representar toda la experiencia humana, desde la vida hasta el más allá, en tres lienzos relacionados entre sí. El primero de la izquierda representa el Paraíso; el último de la derecha, el infierno. Y en el centro se encuentra El jardín de las delicias terrenales.

El Bosco nunca fechó sus obras, lo que complica el trabajo de los historiadores del arte. Algunos afirman que el Bosco comenzó el Jardín de las Delicias en 1490, cuando tenía unos 40 años. (Se desconoce el año exacto de su nacimiento, pero se supone que fue alrededor de 1450.) Pero se estima que la obra fue terminada entre 1510 y 1515.

Fondo de pantalla de el jardín de las delicias terrenales hd

El Jardín de las Delicias es el título moderno que se le ha dado a un tríptico pintado por el maestro de los Países Bajos tempranos Hieronymus Bosch. Se encuentra en el Museo del Prado de Madrid desde 1939. Data de entre 1490 y 1510, cuando el Bosco tenía entre 40 y 60 años, y es su obra completa más conocida y ambiciosa.

El tríptico está pintado al óleo sobre roble y está formado por un panel central cuadrado flanqueado por otras dos alas rectangulares de roble que se cierran sobre el centro a modo de postigos. Las alas exteriores, cuando se pliegan, muestran una pintura en grisalla de la tierra durante la narración bíblica de la Creación. Las tres escenas del tríptico interior están probablemente (aunque no necesariamente) pensadas para ser leídas cronológicamente de izquierda a derecha. El panel de la izquierda representa a Dios presentando a Eva a Adán, el panel central es un amplio panorama de figuras desnudas socialmente comprometidas, animales fantásticos, frutas de gran tamaño y formaciones pétreas híbridas. El panel de la derecha es un paisaje infernal y retrata los tormentos de la condenación.

Barco de los locos

AnónimoAutor desconocido, Fototeca del Real Instituto del Patrimonio Cultural, número de objeto 40002088, como Le Jardin des délices, desde circa 1480 fecha QS:P,+1480-00-00T00:00:00Z/9,P1480,Q5727902 hasta circa 1490 fecha QS:P,+1490-00-00T00:00:00Z/9,P1480,Q5727902, Altura: 220 cm (86. 6 in); Anchura: 390 cm (12.7 ft)dimensiones QS:P2048,220U174728

Koldeweij, A.M., P. Vandenbroeck y B. Vermet (2001) Jheronimus Bosch. Alle schilderijen en tekeningen, Rotterdam: NAi Uitgevers, Gent/Amsterdam: Ludion, ISBN 90-5662-219-6, p. 166, como Tuin der Lusten, 1480-1490, Altura: 220 cm; Anchura: 390 cm Dimensiones QS:P2048,220U174728

La posición oficial de la Fundación Wikimedia es que “las reproducciones fieles de obras de arte bidimensionales de dominio público son de dominio público”. En otras jurisdicciones, la reutilización de este contenido puede estar restringida; para más detalles, véase Reutilización de fotografías de arte público.

El tríptico de haywain

El asombroso cuadro de Hieronymus Bosch, El jardín de las delicias. Detalle excepcional, amplíe o reduzca la imagen dentro del cuadro. Hay muchas historias escondidas detrás de las imágenes dentro de la pintura. Haz clic en los cuadros de texto blancos para escuchar y/o leer las historias.Hay un tráiler de la película relacionada con este sitio web, llamada Jheronimus Bosch, Touched by the Devil.

Sinceramente, creo que esto es mejor que verlo en persona. Los detalles son tan pequeños que tienes que entrecerrar los ojos cuando lo ves en el museo, y siempre hay una multitud. Realmente bien hecho.Publicado por ciudad de gatos a las 15:35 el 6 de febrero de 2016 [7 favoritos]

Esta es la obra de arte que me impactó como un mazazo cuando estaba en el último año de instituto, donde una profesora la tenía colgada en su tablón de anuncios. A su vez, este amor me llevó a una carrera vital de historia del arte, en la que pedí un montón de préstamos estudiantiles para trabajar en museos y conseguir un glamuroso primer plano íntimo con obras de arte famosas, que me gritaran personalmente por teléfono los asistentes de los estudios que trabajan para los principales artistas, y que además me pagaran con las monedas que tuviera el director