Cuándo empezó el surrealismo

El surrealismo es un movimiento artístico del siglo XX que nació como una de las primeras vanguardias artísticas que aparecieron antes de la Segunda Guerra Mundial. La fecha oficial del inicio de la vanguardia surrealista fue en 1924 en Francia cuando se publicó el “Primer Manifiesto”, escrito por André Breton.

“Automatismo psíquico puro, por el que se pretende expresar, verbalmente, por escrito o por otros medios, el proceso real del pensamiento. El dictado del pensamiento, en ausencia de todo control ejercido por la razón y al margen de toda preocupación estética o moral”[1].

Varios antecedentes del movimiento artístico surrealista son “La interpretación de los sueños”, libro que fue publicado por el psicoanalista Sigmund Freud en 1899 y las técnicas del psicoanálisis que se basan en la asociación libre de diferentes ideas. Además, el dadaísmo, como movimiento artístico y cultural que precedió al movimiento surrealista, fue un importante antecedente de éste. Tanto el dadaísmo como el surrealismo nacieron como movimientos opuestos al arte tradicional. Diferentes objetos artísticos de la vanguardia surrealista muestran elementos relacionados con la representación de los sueños.

Características del surrealismo

El surrealismo es un movimiento artístico del siglo XX que nació como una de las primeras vanguardias artísticas que aparecieron antes de la Segunda Guerra Mundial. La fecha oficial del inicio de la vanguardia surrealista fue en 1924 en Francia cuando se publicó el “Primer Manifiesto”, escrito por André Breton.

“Automatismo psíquico puro, por el que se pretende expresar, verbalmente, por escrito o por otros medios, el proceso real del pensamiento. El dictado del pensamiento, en ausencia de todo control ejercido por la razón y al margen de toda preocupación estética o moral”[1].

Varios antecedentes del movimiento artístico surrealista son “La interpretación de los sueños”, libro que fue publicado por el psicoanalista Sigmund Freud en 1899 y las técnicas del psicoanálisis que se basan en la asociación libre de diferentes ideas. Además, el dadaísmo, como movimiento artístico y cultural que precedió al movimiento surrealista, fue un importante antecedente de éste. Tanto el dadaísmo como el surrealismo nacieron como movimientos opuestos al arte tradicional. Diferentes objetos artísticos de la vanguardia surrealista muestran elementos relacionados con la representación de los sueños.

Fotografía del surrealismo

El surrealismo fue un movimiento cultural que se desarrolló en Europa tras la Primera Guerra Mundial y que estuvo influenciado en gran medida por el dadaísmo[1]. Los artistas representaron escenas desconcertantes e ilógicas y desarrollaron técnicas para permitir que la mente inconsciente se expresara[2]. Su objetivo era, según su líder André Breton, “resolver las condiciones anteriormente contradictorias del sueño y la realidad en una realidad absoluta, una superrealidad”, o surrealidad[3][4].

Las obras del surrealismo se caracterizan por el elemento sorpresa, las yuxtaposiciones inesperadas y el non sequitur. Sin embargo, muchos artistas y escritores surrealistas consideran su obra como una expresión del movimiento filosófico en primer lugar (por ejemplo, del “automatismo psíquico puro” del que habla Breton en el primer Manifiesto Surrealista), siendo las obras en sí mismas secundarias, es decir, artefactos de la experimentación surrealista[6] Leader Breton fue explícito en su afirmación de que el surrealismo era, ante todo, un movimiento revolucionario. En aquella época, el movimiento se asociaba a causas políticas como el comunismo y el anarquismo.

Todo individuo tiene derecho a ser

Avant-garde es un término originalmente francés, que significa en inglés vanguard o advance guard (la parte de un ejército que se adelanta al resto). Apareció por primera vez en referencia al arte en Francia en la primera mitad del siglo XIX, y suele atribuirse al influyente pensador Henri de Saint-Simon, uno de los precursores del socialismo. Creía en el poder social de las artes y veía a los artistas, junto a los científicos y los industriales, como los líderes de una nueva sociedad. En 1825 escribió:Los artistas os serviremos de vanguardia, el poder de las artes es el más inmediato: cuando queremos difundir nuevas ideas las inscribimos en el mármol o en el lienzo. ¡Qué magnífico destino para las artes es el de ejercer un poder positivo sobre la sociedad, una verdadera función sacerdotal y marchar en el furgón [es decir, en la vanguardia] de todas las facultades intelectuales!

El inicio de las vanguardiasSe puede decir que el arte de vanguardia comienza en la década de 1850 con el realismo de Gustave Courbet, muy influido por las primeras ideas socialistas. A éste le siguieron los sucesivos movimientos del arte moderno, y el término vanguardia es más o menos sinónimo de moderno.Algunos movimientos de vanguardia como el cubismo, por ejemplo, se han centrado principalmente en las innovaciones de la forma, otros como el futurismo, De Stijl o el surrealismo han tenido fuertes programas sociales.