Qué dar de comer a un gato enfermo que no quiere comer

Es habitual que un gato decida repentinamente que no quiere seguir comiendo un determinado alimento o golosina. Pero a veces un gato deja de comer por una razón más seria. Debe conocer las posibles causas y preocupaciones de la aversión a la comida de un gato. Hay cosas que puede hacer en casa para ayudar a su gato a recuperar el apetito, pero a veces es necesaria la intervención del veterinario.

Si su gato no se encuentra bien, puede dejar de comer porque tiene algo atascado en el estómago o los intestinos. O puede que a su gato no le guste la comida que le ofrece. La falta de alimentación de su gato también puede ser síntoma de una enfermedad o problema que le cause dolor o malestar. Sea cual sea el motivo, es muy preocupante que su gato deje de comer.

Si tiene un gato obeso que ha dejado de comer, puede desarrollar rápidamente una lipidosis hepática al pasar unos días sin comer. Esta enfermedad suele denominarse enfermedad del hígado graso o síndrome del hígado graso y puede ser mortal si no se trata.  Esta es la razón principal por la que es tan importante asegurarse de que su gato, especialmente si tiene sobrepeso, siga comiendo. Con la enfermedad del hígado graso, el hígado se ve desbordado al intentar convertir la grasa en energía. El exceso de grasa que se almacena alrededor del hígado de su gato agrava la situación. El hígado es un órgano crítico y, si no funciona eficazmente, su gato puede sufrir si no recibe un tratamiento inmediato de su veterinario.

El gato no come comida pero come golosinas

Esta página puede contener enlaces de afiliados. Ganamos una comisión por las compras que califiquen – sin costo alguno para usted. Nuestra misión es ayudar a salvar la vida de perros y gatos a través de nuestro contenido educativo. Para ayudarnos a crear más contenido aprobado por veterinarios y entrenadores, considere comprar uno de nuestros libros web para usted o como regalo.

¡La comida! ¡La gloriosa comida! ¡Tan deliciosa y exquisita! Para las personas, la comida es la esencia de la vida y puede reavivar nuestras almas. Comer con otros es una actividad social muy importante. Ayuda a fortalecer nuestras relaciones y nos permite acercarnos a los demás.

Entonces, ¿por qué los gatos nos causan tanto dolor al comer? ¿Son sus paladares tan refinados que no podemos satisfacerlos? Si alguna vez has tenido que lidiar con un gato que aparentemente se niega a comer, seguro que no eres el único que a veces se siente un poco enloquecido e impotente. En cuanto a la teoría de que los gatos son simplemente quisquillosos, es algo cierto, pero hay muchos matices.

Hay varias opciones diferentes para tratar de incitar a tu gato a comer. Tú conoces a tu gato mejor que nadie y, según su personalidad, sabes cuál es la mejor opción para empezar. Además, es posible que tenga que combinar diferentes opciones. Pero no pruebe las combinaciones hasta que no haya probado varias individualmente primero.

Cómo saber si al gato no le gusta la comida

Cuando los gatos no se sienten bien o están estresados, pueden sufrir falta de apetito. Si esto ocurre, habrá que intentar convencerles de que coman, lo que a veces puede resultar difícil. Sin embargo, los gatos responden bien a los cuidados cariñosos.

Si tu gato ha sido operado o tiene una enfermedad grave, puede que no tenga ganas de comer cuando lo lleves a casa. El problema de no comer es que es un círculo vicioso para el gato: se siente mal y no quiere comer, sin comida se siente débil y más enfermo, y así sucesivamente. Si no come, su cuerpo empezará a descomponer el tejido corporal para obtener energía y poder funcionar, y esto puede retrasar la curación. Comer es muy importante para la recuperación. De lo contrario, el sistema inmunitario puede no funcionar correctamente, haciendo que el gato sea más susceptible a las infecciones, e incluso puede verse afectada la forma en que el cuerpo del gato responde a los medicamentos destinados a mejorarlo.

A diferencia de los perros, que pueden pasar un tiempo sin comer sin consecuencias graves, los gatos pueden desarrollar un problema llamado lipidosis hepática, una enfermedad del hígado que puede ser mortal. Esta enfermedad puede desarrollarse si el gato no come ni siquiera durante un tiempo relativamente corto (dos o tres días). También sabemos que los gatos tienen unas necesidades muy específicas en cuanto a nutrientes, y la falta de éstos también puede ser peligrosa. El problema es que los gatos no suelen estar tan orientados a la comida como los perros y pueden ser melindrosos, por lo que a veces puede ser difícil animarles a empezar a comer.

El gato no come pero bebe agua

Su gato ha vuelto a rechazar las croquetas secas que le ha puesto en el cuenco y usted se pregunta por qué es tan testarudo. Si su gato se niega a comer comida seca, suele haber una razón para ello. En general, los gatos prefieren comer comida húmeda porque se aproxima a la carne fresca. Son carnívoros obligados por naturaleza, así que elegirán la opción de comida húmeda en lugar de la seca casi siempre. Los gatos deben comer proteínas cárnicas como principal fuente de nutrientes.

Algunos campos describen la comida seca para gatos como “inapropiada para la especie”. Esto se debe a su menor contenido en agua y proteínas y a su mayor contenido en carbohidratos. Sin embargo, la comida seca para gatos no es perjudicial siempre que el gato tenga acceso a suficiente agua y la beba.

La comida seca para gatos tiene sus ventajas inherentes: (1) pueden conservarse durante más tiempo después de abrir el envase siempre que se coloquen en recipientes herméticos, (2) pueden dejarse más tiempo en el cuenco para que el gato tenga acceso a la comida incluso cuando el propietario está fuera durante el día, una ventaja para los padres de gatos ocupados y (3) son más baratos que la comida húmeda en lata para los padres de mascotas con un presupuesto ajustado.