Síntomas de la úlcera de estómago

Una úlcera se produce cuando una parte del revestimiento del estómago o de los intestinos se erosiona profundamente. Esto suele ocurrir en el estómago (úlcera gástrica) o en el duodeno (úlcera duodenal), que se encuentra en el extremo inferior del estómago y el comienzo del intestino delgado. Las úlceras pueden ser desde bastante pequeñas hasta de un centímetro o más de tamaño.

Las úlceras estomacales (o pépticas) pueden producir pocos o ningún síntoma, o pueden causar un dolor ardiente y punzante en la parte media superior del abdomen que se alivia al comer o tomar un antiácido. Las úlceras de estómago no suelen ser constantes. Por ejemplo, comer a veces empeora el dolor en lugar de mejorarlo con ciertos tipos de úlceras, como las úlceras del canal pilórico, que a menudo se asocian con hinchazón, náuseas y vómitos, síntomas de una obstrucción causada por la hinchazón (edema) y la cicatrización.

Las úlceras duodenales suelen causar un dolor constante. Es posible que el paciente no sienta dolor al despertarse, pero que a media mañana ya esté presente. El dolor puede aliviarse comiendo, pero suele volver a aparecer dos o tres horas después. El dolor que despierta al paciente por la noche es habitual en las úlceras duodenales.

Localización del dolor de la úlcera duodenal

Muchas personas -incluidos algunos médicos- utilizan “gastritis” como una palabra elegante para referirse al dolor de estómago, pero el término realmente significa “inflamación del estómago”. La mayoría de las personas con dolor de estómago no tienen gastritis. Cuando la inflamación aparece, puede causar un dolor y un malestar considerables. Afortunadamente, la gastritis suele ser fácil de controlar. Es posible que tenga que hacer algunos cambios en su estilo de vida o recibir un poco de ayuda de su médico, pero no tiene por qué soportar el dolor.

La mayoría de las personas con gastritis pueden culpar a un pequeño germen, el Helicobacter pylori. Esta bacteria, que suele contagiarse durante la infancia, es básicamente inmune al ácido del estómago. Puede sobrevivir felizmente en el revestimiento mucoso del estómago durante décadas, a menudo sin causar ningún problema. Sin embargo, en algunas personas, el germen penetra profundamente en el revestimiento del estómago, causando gastritis. En muchos casos, la úlcera péptica no tarda en aparecer.

Las dosis regulares de antiinflamatorios no esteroideos (AINE), como la aspirina o el ibuprofeno, son otra fuente importante de gastritis. Todas estas píldoras tienen el potencial de dañar el revestimiento del estómago. El daño suele ser menor y su estómago probablemente se recuperará en pocos días. Pero si tomas demasiadas pastillas, usas analgésicos a diario o si tu estómago no se recupera tan rápido como debería, el revestimiento puede inflamarse fácilmente. Al igual que el H. pylori, los AINE son una de las principales causas de las úlceras.

Localización del dolor de la úlcera de estómago

Una úlcera péptica es una llaga en el revestimiento del estómago o en la primera parte del intestino delgado (duodeno). Si la úlcera se encuentra en el estómago, se denomina úlcera gástrica. Si la úlcera está en el duodeno, se denomina úlcera duodenal.

En el pasado, los expertos pensaban que los factores del estilo de vida, como el estrés y la dieta, causaban las úlceras. Hoy sabemos que los ácidos estomacales y otros jugos digestivos contribuyen a crear úlceras. Estos líquidos queman el revestimiento de los órganos.

El síntoma más común de la úlcera es un dolor sordo o ardiente en el vientre, entre el esternón y el ombligo. Este dolor suele producirse a la hora de comer y puede despertarle por la noche. Puede durar desde unos minutos hasta unas horas.

Úlcera péptica

El dolor de estómago después de comer, o dolor postprandial, suele ser muy molesto y puede ser motivo de preocupación. El dolor postprandial se define como cualquier cambio corporal que se produce después de comer y podría ser un indicador de otros problemas digestivos.

Cualquier dolor que sea de naturaleza crónica o atípica debe ser abordado, ya que podría ser un signo de algo más grave. La visita a un especialista puede ayudar a descubrir la causa exacta y la necesidad de un tratamiento adicional. Algunas de las señales de alarma pueden ser

Indigestión o dispepsia: Excederse en la ingesta de alimentos o bebidas puede provocar a menudo síntomas abdominales molestos como: eructos, gases, hinchazón. Alimentos como la cebolla, la col, el brócoli o las judías pueden causar molestias.    Los alimentos picantes y la cafeína también pueden causar dolor y gases. La indigestión es más un síntoma que una enfermedad. El tabaquismo y el consumo de alcohol también pueden agravar los síntomas.

Acidez: La acidez es un dolor ardiente en el pecho, justo detrás del esternón. El dolor suele empeorar al acostarse o agacharse, después de comer y por la noche. La acidez intermitente no suele ser motivo de preocupación. Sin embargo, si los síntomas se producen más de dos días a la semana o interrumpen las actividades de la vida diaria, puede estar justificada una visita a su médico.