Caldera de pellets para radiadores opiniones

Caldera de pellets de biomasa

Las estufas de pellets no emiten CO2, son automáticas, más fáciles de usar que las de leña y emiten pocas partículas. Como tales, su éxito ha sido bien merecido. Pero la crisis sanitaria las ha hecho menos competitivas (quizás temporalmente).

Las estufas de pellets son ideales para proporcionar calefacción suplementaria entre temporadas. Como tales, representan un buen valor (aunque los pellets se han vuelto más caros que otras fuentes de energía), porque el uso de una estufa evita tener que reiniciar la calefacción central al principio del invierno y permite detenerla antes al final de la temporada de calefacción.

Si la estufa funciona unas horas al día entre octubre y abril, le costará entre 150 y 200 euros al año en pellets y electricidad, y hasta 300 euros para un uso más intensivo. Pero la calefacción a base de pellets ha dejado de ser competitiva desde la caída de los precios de la energía ligada a la crisis sanitaria.

El precio de los pellets siguió siendo más barato que el de otros combustibles durante mucho tiempo. Pero con la crisis sanitaria, el precio de la energía convencional se ha desplomado, y los pellets se han vuelto más caros por kWh que el gas o el fuel.  Dos toneladas de pellets contienen tanta energía como una tonelada de fuel o 1 m3 de gas. Por tanto, se consumirá el doble, en peso.

Precios de las calderas de pellets de madera

Durante los últimos cuatro años he estado revisando propuestas de sistemas de calefacción con calderas de pellets. Los profesionales de la calefacción, desde los contratistas hasta los ingenieros profesionales, son quienes los presentan. Estas presentaciones son necesarias para participar en un programa de incentivos que ofrece importantes descuentos para fomentar el crecimiento del mercado de la calefacción por biomasa.

Una situación común es que muchos diseñadores ven las calderas de pellets como una simple caja que quema pellets y produce agua caliente. Quieren colocar esa caja junto a una caldera de gasóleo o propano ya existente y conectarla al sistema de distribución existente. Rara vez consideran que el sistema de distribución existente es un terreno fértil no sólo para mejorar el rendimiento de esa nueva caja de combustión de pellets, sino también para mejorar el confort proporcionado por el sistema.

A continuación se describe el «cambio de imagen» de un sistema de calefacción hidrónica de gasóleo existente, que fue elegido para recibir una moderna caldera de pellets. Este cambio de imagen muestra una forma de integrar la nueva caldera de manera que se respeten sus características únicas de funcionamiento. También muestra cómo se mejoró al mismo tiempo el sistema de suministro de calor, que es un reto para el confort.

Caldera de pellets de interior

La calefacción con pellets de madera -hechos de serrín compactado- es una forma muy controlable de utilizar el combustible de madera. La caldera de pellets de Judith mantiene el fuego automáticamente y la programa con un controlador electrónico.

Judith optó por una caldera de pellets como opción de calefacción cómoda, eficiente y respetuosa con el clima. Una parte del calor va directamente a la habitación en forma de aire caliente, pero la mayor parte de la producción es agua caliente para la calefacción central. La caldera alimenta los radiadores y el acumulador de agua caliente de la casa. Al igual que con una caldera de gas, su sistema de calefacción se programa con un controlador electrónico. La caldera de pellets alimenta automáticamente el fuego y utiliza ventiladores controlados por microprocesador para lograr una eficiencia óptima.

Judith llena su caldera manualmente, vertiendo pellets de una bolsa de 15 kg directamente en la parte superior de la caldera. Una alternativa sería utilizar una caldera de pellets más grande que se alimente automáticamente de una tolva. Los pellets pueden ser entregados por un camión y bombeados a la tolva, por lo que es posible utilizar esta forma de calefacción de leña sin ningún tipo de trabajo manual.

Precios de las calderas de pellets de madera en el reino unido

Las «hidroestufas» o «termoestufas» son aquellos generadores de calor que se conectan con el sistema hidráulico existente y calientan el agua para los radiadores en lugar de producir aire caliente. A continuación te contamos cinco curiosidades que no conocías de este producto tan interesante.

La potencia de las estufas hidráulicas se indica con dos valores. El primer valor indica la potencia total del producto y el segundo indica la potencia transferida al agua. Normalmente la diferencia entre ambos es de 2-3 kW e indica el calor que la estufa transfiere de forma natural a la habitación en la que está instalada. Observará que tt no es un valor muy alto.

Las estufas de agua de más de 20-22 kW, como el modelo Swing de MCZ en la foto de abajo, pueden combinarse con un kit especial para producir agua caliente sanitaria instantánea (kit de ACS). Las desventajas son que el agua sale del grifo ya caliente sólo si la estufa está encendida y funcionando a plena potencia. Mientras que si está apagada o funcionando a mínima potencia, puede tardar varios minutos en calentarse. El caudal de agua tampoco es muy elevado, por lo que siempre se recomienda combinarla con un hinchador.