trébol de corcho para vino

Tanto si se trata de una sola copa con la cena como si los invitados se han marchado de la fiesta con unas cuantas botellas abiertas por ahí, no es nada raro enfrentarse a la tarea de encontrar un lugar para las botellas abiertas donde no se estropeen.

La conservación de los vinos finos es bastante sencilla cuando el corcho está todavía en su sitio, y muchos de los principios básicos se aplican también al vino sobrante. Sin embargo, un precinto roto requiere un cuidado extra para asegurarse de que puede disfrutar de esa media botella de vino blanco antes de que se convierta en vinagre. Aquí está todo lo que necesitas saber sobre cómo guardar el vino sin corcho.

Ahora que ya conoces las mejores prácticas para guardar el vino que te sobra -es decir, en posición vertical en un lugar fresco y oscuro-, es hora de pensar en cómo mantener el aire no deseado fuera de la botella. Pruebe una de estas ideas para tapar su botella habitual, de modo que pueda terminarla en uno o dos días y seguir disfrutando del mismo gran sabor que le gusta.

Guarda el corcho en el congelador inmediatamente después de abrir el vino. Esto ayudará a que se contraiga y puede hacer que sea un poco más pequeño para que se deslice de nuevo en su lugar sin un alboroto.La forma más fácil de volver a cerrar su botella de vino para su almacenamiento es simplemente poner el corcho original de nuevo. A veces esto es fácil, pero a veces el corcho se expande y hace que sea difícil volver a colocarlo en su sitio. Puedes hacerlo más fácil probando los siguientes trucos:

kit de trébedes de corcho para vino

Con el objetivo de encontrar y reutilizar tantas aplicaciones para los corchos como sea posible, ReCORK es un programa de reciclaje que se centra en una pieza específica para aumentar la apuesta ecológica. Patrocinado por el mayor productor mundial de tapones de corcho natural para vino, Amorim de Portugal, la gente de ReCORK se ha unido para formar un programa de reciclaje a nivel nacional con sus filiales de ventas en Estados Unidos, Amorim Cork America y Portocork America, y el fabricante de calzado SOLE.

El funcionamiento es muy sencillo: usted, el consumidor, recoge los corchos y los entrega al programa para que sean reciclados. SOLE los convierte en componentes de calzado, probablemente la parte más publicitada de lo que hace la empresa. Pero los tapones de vino de corcho natural son muy versátiles; son ideales para el reciclaje y pueden fabricarse en suelos, juntas, tablones de anuncios, equipamiento deportivo e incluso utilizarse como enmienda del suelo en el compost.

decoración con corchos de vino

Te preguntarás por qué alguien se molestaría en guardar los corchos de vino. Pues porque es fácil y porque pueden utilizarse en un montón de proyectos de bricolaje y manualidades creativas e interesantes. Reutilizar los corchos de vino es una de las cosas más fáciles que puedes hacer y suele ser muy divertido. Echemos un vistazo a algunas de estas manualidades y veamos si alguna de ellas te inspira.

1. Tapones de vino espeluznantesVer en la galeríaVer en la galeríaPara este pequeño proyecto, ni siquiera tienes que reutilizar los corchos de vino. Se pueden seguir utilizando para el mismo fin, solo que tendrán un aspecto un poco diferente. La idea es darles un cambio de imagen inspirado en Halloween añadiendo pequeñas linternas de plástico en la parte superior de cada corcho y convirtiéndolos en espeluznantes tapones de vino. Es un proyecto divertido y sencillo que también pueden hacer los niños.

2. Un salvamanteles de corchoVer en la galeríaVer en la galeríaSi por casualidad tienes un montón de corchos de vino y ganas de hacer algo con ellos, una idea puede ser hacer un salvamanteles de corcho como el que aparece en diys. Para ello, primero tendrás que cortar cada corcho por la mitad. En este caso se utilizaron un total de 35 corchos. Una vez cortados por la mitad, se colocaron todos en forma de hexágono y se pegaron, y luego se añadió cinta de papel de aluminio alrededor del borde.

#8 corchos rectos

Muchos adultos disfrutan bebiendo vino en casa o en restaurantes y en ocasiones especiales con amigos. Los corchos sobrantes de las botellas de vino ofrecen oportunidades de reciclaje creativo. Los corchos naturales y los sintéticos cierran las botellas de vino de forma que permiten que llegue el mínimo de aire al vino. El corcho natural procede de los árboles. El polietileno de baja densidad (LDPE #4) es el material utilizado en los corchos sintéticos. Tanto el corcho natural como el sintético son reciclables. Los recicladores transforman los corchos de vino en objetos prácticos y atractivos, especialmente para el hogar.

Durante siglos, los viticultores han utilizado el corcho natural para embotellar y almacenar el vino. Es elástico, fuerte y casi impermeable al aire. El corcho procede de la corteza del Quercus suber: el alcornoque. En la actualidad, la mayor parte de los bosques de alcornoques existentes crecen en España y Portugal. Los árboles son originarios del suroeste de Europa y del noroeste de África. Los alcornoques viven aproximadamente 200 años. A partir de los 25 años, los cultivadores pueden cosechar la corteza cada 9-10 años sin dañar el árbol. Esto hace del corcho un recurso renovable que no daña el medio ambiente. El corcho es susceptible al hongo TCA (2,4,6 – tricloranisol) que crece en los alcornoques. Además, los tapones de corcho pueden desmoronarse, dejando trozos de corcho en el vino. Estos factores restan popularidad a los tapones de corcho natural para las botellas de vino. Los corchos de polietileno de baja densidad no se desmoronan y no son susceptibles de sufrir el hongo TCA. A pesar de estas ventajas, muchos consumidores prefieren la autenticidad del material de corcho natural.