Santiago de peñalba planta
Mudanzas ‘soledad’ – feeel | betevé
Lo primero que observamos al entrar en la iglesia es una construcción de doble ábside según la tradición de las iglesias de tipo norteafricano que se habían construido tres siglos antes en el suroeste de España, de las que aún se pueden ver algunos restos, como los de la basílica de Vega de Mar y los que en el siglo X más ejemplos conocidos por los repobladores mozárabes debieron quedar, a encontramos otro ejemplo de dos ábsides contrapuestos en San Cebrián de Mazote, de fecha algo anterior y construido por monjes venidos de Al Andalus.
El interior está formado, además de los dos ábsides, por otros dos compartimentos centrales, situados entre ellos, la cabecera y la nave, y otros dos a cada lado de la cabecera pero de menor tamaño. Todos ellos están concebidos como espacios independientes con diferentes formas de cubrición y separados por arcos de herradura muy pronunciados, de tipo cordobés del siglo IX, aunque con diferentes formas entre ellos.
El ábside opuesto es similar al anterior, con la única diferencia de una mayor altura; la planta tiene una forma de herradura muy abierta, casi prolongada en semicírculo y el arco de acceso es también mayor; en este caso, sin moldura ni remate de goteo. San Genadio estuvo enterrado allí hasta el siglo XVI.
Cueva de san genadio. peñalba de santiago. el bierzo
Al llegar al pueblo, tendremos que dejar el coche en el gran aparcamiento gratuito que hay a la entrada, ya que aquí termina la carretera. De esta manera, podremos disfrutar aún más del pueblo, ya que no hay coches ni ruidos de motores.
Desde aquí, se entra en el Valle del Silencio, hasta la cueva de San Genadio, en una ruta de 30 min de ida y otros 30 de vuelta, y sobre todo, disfrutaremos de unas preciosas vistas del valle y de las montañas -montes Aquilanos-.
El pueblo fue fundado en el siglo X, por San Genadio, siendo un pequeño monasterio de influencia morisca la primera construcción. El Monasterio fue construido entre los años 909 y 937.Cerca del pueblo, a unos 30 minutos andando, se puede visitar la «Cueva de San Genadio», donde al parecer el santo se retiraba a meditar. Se dice que, en su búsqueda del silencio, llegó a llamar al silencio a las aguas del Oza (río). No es de extrañar que este valle, hoy en día, sea conocido con el nombre de Valle del Silencio.
Las fotos te dan una idea de cómo es el pueblo, con sus casas con tejados de pizarra y sus calles empedradas. Una auténtica delicia, aunque los nostálgicos echarán de menos los tiempos en que todo estaba pendiente de ser restaurado.
Lugares que ver en ( ponferrada – españa )
El abad Salomón promovió la construcción de la iglesia en la primera mitad del siglo X, época de prosperidad en el Reino de León. Se terminó en el reinado de Ramiro II, que amplió los límites de su reino más allá del río Duero. Ramiro II hizo múltiples donaciones a la iglesia y al monasterio.
La decoración de la iglesia es una mezcla de elementos celtas, incluyendo símbolos lunares y astrales; influencias bizantinas que se aprecian en su planta de cruz griega; elementos árabes, especialmente una pequeña cúpula de techo de paraguas que cubre el altar principal; e influencia mozárabe, que se aprecia en sus famosos arcos de herradura.
Peñalba de santiago desde lo alto
El arte mozárabe se desarrolló en la Península Ibérica entre finales del siglo VIII/principios del IX y mediados del XI como resultado de la convergencia e hibridación de diversas tradiciones culturales. La arquitectura, la escultura y el mobiliario forman parte de un conjunto excepcional por su monumentalidad, su estado de conservación y su singularidad.
El mozárabe es un arte único, de carácter ecléctico, producto del sincretismo de diferentes fuentes, que se desarrolla en un tiempo y un entorno geográfico concreto, basado en el excepcional desarrollo de los acontecimientos en Iberia en la Alta Edad Media. Es, por tanto, un reflejo directo de la combinación de la tradición local y la innovación foránea que llegó a las costas ibéricas junto con la población musulmana en el año 711.
Iglesia de San Pedro de la NaveEn 1930, esta iglesia fue trasladada desde su emplazamiento original al actual en Campillo para salvarla de las aguas del embalse de Ricobayo. De origen seguramente monasterial, su planta es un híbrido entre cruciforme y basílica, todo ello inscrito dentro de un rectángulo del que sólo sobresalen la capilla mayor y los pórticos más cortos de los brazos del crucero, por lo que el volumen cruciforme queda también definido en el alzado.Se construyó con piedra arenisca, con sillares cuidadosamente tallados, unidos en algunos casos con juntas de madera de doble cola de milano. La planimetría muestra un espacio muy compartimentado, principal indicio de su función monástica. En su origen, posiblemente estaba totalmente abovedada con la misma sillería de piedra arenisca, mientras que en la actualidad su nave, pasillos y crucero están cubiertos con techos de madera. Las puertas, ventanas y arcadas tienen forma de arcos de herradura. Su escultura arquitectónica es de gran interés, con un rico conjunto de frisos, impostas y capiteles decorados con motivos vegetales y figurativos, así como un horologio (reloj solar) en la entrada de la capilla mayor. Los capiteles más famosos y singulares se encuentran en el vano del crucero, con escenas del sacrificio de Isaac y de Daniel en el foso de los leones.